Últimamente tengo un poco de obsesión con la mezcla de sabores dulce y salado. Sé que no a todo el mundo gusta, y creo que tiene más que ver con la “poca práctica” a que realmente no guste al paladar. Yo por eso hoy vengo cargado con esta propuesta tan fácil de hacer, rápida y original, que igualmente sirve como aperitivo si se presenta en panes más pequeños, como primer plato si el resultado es más grande.

Para hacer este plato no necesitarás más que un buen pan de hogaza, carne mechada y fruta de temporada. El otro día, desde Icarben, recibí un paquete con una excelente selección de sus productos, y no quería dejar pasar la oportunidad de poder enseñaros alguno de ellos. En concreto me enviaron la carne mechada con la que hice este plato.
Icarben es una empresa con tradición, situada en la Serranía de Ronda y en la que puedes comprar sus productos a través de su web. Me ha gustado también mucho su zurrapa de lomo para las tostadas en estos días que ya empieza a refrescar.

Por cierto, estos panes son de mis amigos de Obrador La Hogaza, a quienes ya conocimos en mi programa para Canal Cocina, y en quienes siempre confío por su calidad y por sus productos 100% ecológicos.

Esta es la carne mechada de Icarben de la que os hablaba antes, jugosa y con un sabor especiado muy agradable. Se puede tomar en caliente o en frío. En casa nos gusta mucho solo con aceite de oliva y pimienta negra recién molida.

Un saludo para quién esté al otro lado.